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Cuando tenemos unos días disponibles o un fin de semana, hacer una escapada a la montaña, es una buena opción.
El contacto con la naturaleza, el paisaje, contemplar por la noche el cielo, libre de contaminación lumínica, nos aporta energía y serena nuestras ajetreadas vidas.
Podemos elegir un hotel para nuestra estancia pero, es mucho más atractivo alojarse en confortables cabañas de madera, completamente equipadas. Además, en ellas se suelen admitir animales, algo que también hay que tener en cuenta.
Muchos de estos alojamientos suelen tener servicios de restaurante para los que no deseen cocinar.
La cabaña adaptada al entorno, permite realizar excursiones, deportes de nieve, paseos a caballo, darnos un paseo en bicicleta de montaña, practicar escalada y mucho más.
Al regreso de nuestras actividades al aire libre, sentarse al calor de la chimenea, leyendo, viendo la televisión o charlando con nuestros acompañantes, pude ser un buen final de la jornada.
Las tarifas son muy variadas, pero podemos encontrar precios a partir de los 20 € por persona y noche.